Beyoncé nos abre la puerta a un pasillo oscuro y seductor con Haunted. Entre susurros y bases electrónicas, la artista describe una atracción tan intensa que parece sobrenatural: "I know if I'm haunting you, you must be haunting me". Las imágenes de fantasmas en las sábanas, pulmones embrujados y una lengua traviesa crean una atmósfera de deseo que asusta y fascina a la vez. Aquí, los dos amantes son cazador y presa simultáneamente, atrapados en un hechizo mutuo donde cada gesto provoca un eco en el otro.
Más allá de la sensualidad, la letra desprende un fuerte sentido de empoderamiento compartido. Beyoncé avanza con seguridad por los pasillos y convierte el dormitorio en su propia pasarela, recordándonos que el control y la fantasía pueden coexistir. Haunted mezcla misterio gótico con erotismo contemporáneo para invitarnos a aceptar nuestros impulsos más profundos y reconocer que, cuando la conexión es real, ambos cuerpos —y espíritus— se buscan con la misma intensidad.