¿Alguna vez te has emocionado tanto con el comienzo de una relación que te saltas los semáforos en rojo de tu propio corazón? Eso le pasa al narrador de Ahead Of Myself. Entre copas de champán y mudanzas apresuradas, cree haber pasado página, pero pronto descubre que todavía arrastra equipaje emocional. Cada "I get ahead of myself" es un recordatorio de que se puso el traje de novio cuando ni siquiera había ordenado su cuarto interno.
La canción es un himno a la autocrítica y al freno de mano emocional: nos invita a reconocer que la confianza excesiva puede ser tan peligrosa como la inseguridad. X Ambassadors muestran que no basta con sentirse "rock steady", muy seguro; hace falta tiempo, honestidad y un poco de paciencia antes de abrir de nuevo el corazón. Así, entre ritmos pegadizos y confesiones sinceras, la banda anima a bajar la velocidad, aprender de los tropiezos y esperar el momento adecuado para brindar de verdad.