¿Alguna vez has sentido que el tiempo se detiene cuando alguien entra en la habitación? Eso le ocurre al narrador de “Lose My Breath”, la explosiva colaboración entre los surcoreanos Stray Kids y el maestro del pop Charlie Puth. En la letra, cada encuentro visual con la persona amada le corta la respiración, le hace temblar las rodillas y le deja el corazón a punto de estallar. La canción retrata ese flechazo instantáneo que descoloca todos los sentidos: el protagonista confiesa que no sabe adónde lo conducirá esta pasión, pero está seguro de que necesita ese amor como el aire.
El tema combina imágenes de vértigo físico—“me quitaste el aire de los pulmones”—con la promesa de una entrega total: “siempre estaré aquí, jamás huiré”. Entre beats vibrantes y voces armonizadas, Stray Kids y Charlie Puth consiguen transmitir la mezcla de euforia y vulnerabilidad que provoca enamorarse a primera vista. “Lose My Breath” es, en pocas palabras, la banda sonora de un ataque de amor tan intenso que literalmente te deja sin aliento.