Sugar es un himno electrónico del DJ alemán Robin Schulz junto al canadiense Francesco Yates que celebra la atracción irresistible. A través de imágenes golosas como cherry lips y el apodo "Sugar", la canción describe a una mujer casi hipnótica: hermosa, brillante bajo luces de colores y capaz de elevar a cualquiera "más alto que el techo" con su encanto. Sin embargo, su dulzura viene con advertencia. El narrador aconseja pensar dos veces antes de jugar con su fuego porque, si te quemas, no deberías sorprenderte.
El estribillo repetido "Sugar, how you get so fly?" combina la idea de volar con la jerga fly (genial, atractivo) para resaltar lo alucinante de la experiencia. Entre ritmos pegadizos y voces suaves, el tema mezcla lo dulce con lo picante para retratar esa sensación tan adictiva de sentirse enamorado y en peligro al mismo tiempo: un subidón de azúcar que eleva los sentidos mientras advierte del posible bajón.