¿Qué sucede cuando la paciencia se acaba y nace una versión imparable de ti mismo? Esa es la esencia de Look What You Made Me Do. En esta canción, la artista estadounidense Taylor Swift se sacude el papel de “la chica buena” y se presenta como una estratega calculadora: hace una lista de enemigos, subraya los nombres en rojo y repite un acusador “mira lo que me hiciste hacer”. Cada verso rebosa ironía y sed de justicia, recordándonos que el karma no olvida.
Entre imágenes de reinos usurpados, escenarios inclinados y la icónica frase “¡la vieja Taylor está muerta!”, la cantante confiesa que ya no confía en nadie y que será “la actriz en tus peores pesadillas”. El resultado es un himno de reinvención y empoderamiento que anima al oyente a levantarse, aprender de los golpes y devolver el fuego con inteligencia.