First Things First es una sacudida musical que Pentatonix dedica a cualquiera que corra tras el dinero, la fama o los seguidores como si fueran la única medida de éxito. La letra nos recuerda, con ritmo contagioso, que ningún jet privado ni millón en el banco define tu valor; lo que realmente cuenta no tiene etiqueta de precio. Entre palmas y armonías, el grupo nos invita a frenar, tomar aire y construir nuestro propio camino paso a paso antes de presumir de victorias.
Cuando el estribillo repite “Wait a minute, first things first”, la banda deja claro el orden de prioridades: amor y humildad primero. Solo así evitamos la envidia y la rivalidad que suelen acompañar la búsqueda de estatus. El resultado es un himno motivador que enseña a valorar lo intangible y a celebrar los logros con sencillez, convirtiéndose en la banda sonora perfecta para recordar que lo auténtico siempre brilla por sí mismo.