Dope es una confesión cruda y sin filtros. Lady Gaga, cantante estadounidense de ascendencia italiana, nos abre la puerta a una noche de excesos donde el corcho de la botella ya voló y la fiesta apenas empieza. Pero entre tragos y humo surge la verdadera historia: la artista suplica perdón por los errores que la alejaron de la persona que ama. El estribillo martillea la idea central: necesita a esa persona más que cualquier droga. Así, cada verso revela el costo emocional de “vivir alto” y las profundísimas grietas que deja la adicción.
La canción avanza como un viaje de arrepentimiento y vulnerabilidad. Referencias numéricas (“un último trago”, “dos últimos remordimientos”, “12 escalones solitarios”) pintan la lucha contra la dependencia química. Sin embargo, entre lágrimas y súplicas aparece la chispa de esperanza: el amor todavía puede rescatarla. Al invocar “Bell Bottom Blue” (un clásico de Eric Clapton sobre la añoranza y la pérdida), Gaga conecta su dolor con el de otros artistas y nos invita a cantar con ella. En resumen, Dope es una balada poderosa que convierte la batalla contra las adicciones en un himno de amor desesperado, recordándonos que, a veces, alguien puede ser nuestro camino de regreso a la luz.
Lady Gaga es una cantante, compositora y actriz estadounidense, nacida como Stefani Joanne Angelina Germanotta en Nueva York en 1986. Se hizo mundialmente famosa con álbumes como The Fame y Born This Way, y con éxitos como "Just Dance", "Poker Face", "Bad Romance" y "Born This Way".
Ganadora de múltiples premios Grammy, además de un Óscar, un BAFTA y Globos de Oro, también ha brillado como actriz en American Horror Story y en la película A Star Is Born. A través de su Born This Way Foundation, trabaja por la salud mental de los jóvenes y los derechos LGBTQ+, convirtiéndose en un símbolo de diversidad, inclusión y autoexpresión para sus fans, conocidos como sus Little Monsters.